Ficción 0

"Esto es como en las películas Anyimar"

Sí acemita, es nuestra película.

Este es el inicio de la historia que decidimos contar y de cómo las personas correctas se cruzan en nuestro camino para ayudar

(en mayor o menor proporción).

Y te confieso que me da miedo, muchísimo; pero estoy segura de que haber juntado tu romanticismo intenso con mi racionalidad exagerada es de las mejores cosas que se nos han ocurrido.

(Y mira que nosotras inventamos)

Resultará... Por las voces que se ocultan detrás del silencio, por el aliento de quienes en su lucha no se dejan vencer, por la brisa densa que huele a salitre y decepción pero clama libertad.

Resultará, tú me lo prometiste; yo te lo prometí

(a ti y a mí)

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No pasa

Yo voy a ser muy franca, yo no leo ni mucho de poesía, ni mucho de literatura, ni mucho de nada (sí, de nada)...Pero en alguna oportunidad anoté en mi agenda (porque eso si me gusta, rescatar frases hechas y a medio hacer) una frase bien particular que leí en un momento en la que caía como anillo al dedo...

"Fue haciendo del dolor una costumbre, sembrando de fracasos tu memoria"

La frase venía del gran Benedetti y correspondía a un fragmento de su poema Ayer.

Ahorita viendo las noticias me entero de que él (que sigue siendo grande), hoy ha muerto. Enseguida recordé que algo tenía en mi agenda de eso, corrí a buscarla y decidí completar el poema.

Porque ayer pasó y hoy no sé si pasa;

porque hoy se fue; pero él, definitivamente, no pasa

Ayer pasó el pasado lentamente con su vacilación definitiva

sabiéndote infeliz y a la deriva con tus dudas selladas en la frente

Ayer pasó el pasado por el puente y se llevó tu libertad cautiva

cambiando su silencio en carne viva por tus leves alarmas de inocente

Ayer pasó el pasado con su historia y su deshilachada incertidumbre

con su huella de espanto y de reproche

fue haciendo del dolor una costumbre sembrando de fracasos tu memoria

y dejándote a solas con la noche

Descansa Benedetti y llena el cielo con tus poemas

que la Tierra seguirá su curso con los problemas de los mortales

con el regocijo de sus risas

con la costumbre y las rutinas

con la opresión y los desmanes

con la lucha de los soñadores

y también con sus batallas perdidas

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Una cosita que encontré

Descubrí un blog divertidísimo... Me gusta ella y sus errores, tan parecidos a los nuestros...

Aquí me copio una de sus ilustraciones

Diez cosas que hace una mujer cuando se separa

(cuando no termina de hacerlo y cuando reincide con responsabilidad)

Guión: Paula-La malvada

Ilustración: Sole Otero

"Mientras se busca al príncipe azul hay que reírse de los payasos"

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Váyanse al mismísimo carajo!

"Me siento estafada", pronunció ella totalmente furiosa y desconcertada.

La incomprensión corrió a alta velocidad por cada centímetro de su piel. No entendió cómo aquel hombre que días antes le profesaba amor eterno acabó de un cuajo con su relación.

Ella, indómita, trató sin resultados. Se quedó sin comprender cómo aquel ser, con quien horas antes había planificado matrimonio, niñitos, vida y hogar; de un lastre la arrancaba de su corazón y le pedía que "por favor lo entendiera". (¡qué bríos hay que tener!).

Ella, no comprendió (sigue sin hacerlo) por qué esa persona por la que luchó contra el mundo y sus propios demonios hoy le dice que "no puede hacer nada más por ella".

¿Qué parte de su hemisferio cerebral le hizo pensar a aquel idiota funcional que ella podía entender semejante estupidez? ¿En qué momento la absoluta entrega que uno profesa en nombre del amor se convierte en el punto exacto en el que esa persona que dice "amarte" se afinca para lastimarte tanto?

¡Váyanse al carajo señores!

Sí, al mismísimo carajo

Porque en la vida no puede andar uno jodiendo a quien no te jode, maltratando a quien no te maltrata, irrespetando a quien te respeta y lastimando a quien no hace más que cuidarte.

Al diablo los hombres con su maldito (sí, maldigo) cliché del "TE AMO, PERO NO QUIERO HACERTE SUFRIR". No se vale hacerse el pendejo e infringir tanto daño "en nombre del amor". Abandonen sus escudos forrados de cobardía, porque decir que "no quieres hacerme sufrir" no hace la decepción menos dolorosa ni más creíble su falso pesar. Tengan algo de respeto con la otra persona que, sin duda, jamás les haría tanto daño, excusándose detrás de palabras verborreas.

Porque cuando uno comparte su vida con alguien hace un tácito pacto de reciprocidad. En el preciso momento en que este se rompe hay que tener valor para admitir los errores con madurez y responsabilidad.

En definitiva, si algo he aprendido (de a poquito, con mis golpes y ahora con los tuyos) es que quien te ama (no quien dice amarte) jamás te lastima. Y si alguna vez te hace daño hará lo que sea (sí, cualquier cosa) para no volverlo a hacer, sin que eso represente un sacrificio.

Esta va por ti amiga, porque hoy, una vez más, resulta tan injusto...

No es justo dar tanto y recibir tan poco...

No es justo amar con centimetraje...

No es justo que la vida se te pase aspirando el imposible

porque si les regalas el mundo, no permitas recibir menos que eso,

¡No señor!

...

Para amar no hay que ser menos ambicioso pero sin duda, sí menos egoísta (me dije).

...

O por lo menos un poco más inteligente (me respondí)

...

Porque actuar como una porquería de persona con quien te ama, te cuida y te respeta, no es más que un acto reflejo de la propia estupidez humana, de esa que a borbotones brota de sus cuerpos (repliqué)

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